Hey, que eso que yo te escribo no se lo dedico a nadie más. Entonces puedo decir que me extrañas cuando de reojo veo que mi nombre sigue escrito en tu cuaderno. Mantengo el invierno dentro y dejo la primavera a tu merced para que no reclames las flores que de pronto se marchitan antes de volver a verte. Y si ya nada te reconforta, siempre puedes anhelar un mejor amor que el mío.
27/Enero/2014 (10:01 p.m) A
Hey, que eso que yo te escribo no se lo dedico a nadie más. Entonces puedo decir que me extrañas cuando de reojo veo que mi nombre sigue escrito en tu cuaderno. Mantengo el invierno dentro y dejo la primavera a tu merced para que no reclames las flores que de pronto se marchitan antes de volver a verte. Y si ya nada te reconforta, siempre puedes anhelar un mejor amor que el mío.
27/Enero/2014 (10:01 p.m) A